¿Es rentable comprar un coche híbrido?
La pregunta de si es rentable comprar un coche híbrido es una de las más comunes para los que quieren dar el paso y dejar atrás el diésel o la gasolina. En este artículo te damos las respuestas que necesitas.
La principal motivación por la que los compradores, al renovar su coche, deciden optar por un coche híbrido eléctrico, son los menores niveles de emisión CO2 que lanza el vehículo al medio ambiente.
Según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente, un coche híbrido enchufable emite un 36% menos de emisiones CO2 que un coche de gasolina de tamaño mediano.
Pero entonces llega la pregunta que tantos conductores se hacen: ¿es rentable comprar un coche híbrido? Hoy te traemos la respuesta.
Las claves para saber si es rentable comprar un coche híbrido
No hay una única respuesta para esta pregunta tan común. Hay diferentes factores que debemos valorar para saber si merece la pena un híbrido. Entre otras, debemos preguntarnos los kilómetros que recorreremos al año, si tenemos una conducción prudente o si nuestra conducción principal será o no por ciudad.
Conducción por ciudad
Si el mayor uso que vamos a dar al vehículo es para movernos por ciudad, seguramente un híbrido sea la mejor opción.
En cuanto a los últimos modelos de coches híbridos del mercado, en más de un 50% de los trayectos urbanos, el motor eléctrico liberará al motor de combustión de trabajo y funcionará en modo 100% eléctrico y, por tanto, no consumirá combustible.
Ahorro en el consumo de combustible
Saber si es rentable comprar un coche híbrido dependerá mucho del modelo por el que nos acabemos decantando. “Un híbrido medio puede llegar al 15 por ciento, un híbrido completo al 25 por ciento y un híbrido enchufable en torno al 50 por ciento”, explica José María López, director del Instituto de Investigación del Automóvil, a la revista ‘Motorpasión’.
Conociendo estos datos, se puede llegar a la conclusión de que “el coche híbrido puede resultar más rentable que un diésel a partir de los 15.000 kilómetros al año, considerando un uso del vehículo en torno a ocho o diez años y muchos recorridos urbanos”, apunta la revista.
El coste de mantenimiento
En el mismo reportaje, la revista se basa en el informe ‘Vehículo y ahorro según motorización’, de la consultora Audatex. Este estudio establece que “el mantenimiento de un coche híbrido puede ser hasta un 50 por ciento inferior al de un gasolina y diésel”.
¿A qué se debe este menor coste? A que los modelos híbridos no cuentan con piezas como la correa de distribución, el alternador o el motor de arranque, que en los coches convencionales pueden requerir de reemplazos y suelen ser las que más atención requieren. En definitiva, el ahorro en su mantenimiento puede ser hasta un 30% mayor que el de un coche diésel o de gasolina.
Precio de los vehículos y ayudas
Otra de las preguntas para saber si merece la pena un híbrido van enfocadas a su precio.
Hace años la diferencia de precios entre un vehículo híbrido y uno convencional era el principal inconveniente. Pero, ¿qué ha cambiado hasta llegar al día de hoy? Cada vez hay una mayor demanda de los modelos híbridos y una mayor competencia entre fabricantes, lo que ha conseguido que esa brecha que existía anteriormente a día de hoy sea casi inexistente.
Además, comprar un coche híbrido cuenta con ciertas ventajas, como las ayudas del Plan MOVES III, que se aplicaron el pasado 20 de abril del 2021 y que permanecerán hasta el 2023. Unas ayudas que pueden ascender hasta los 5.500 euros, previo achatarramiento del coche anterior. También puedes encontrar coches seminuevos a un precio mucho menor.
Por otra parte, hay que recordar que los coches cero emisiones están exentos de pagar el Impuesto de Matriculación.
Y de cara al futuro… ¿es rentable comprar un coche híbrido?
Los datos son claros. Y cada año la ventaja económica de los coches híbridos parece ser mayor. El Laboratorio Nacional Argonne, de EE.UU., realizó un estudio en el que aseguraba que, a la larga, un coche eléctrico puede llegar a ser hasta un 40% más barato que uno convencional.